Películas francamente sobrevaloradas (1)

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El club de los poetas muertos (Peter Weir, 1989)

Por Fernando Navarro/Navarth

Dirán ustedes ¿y a qué viene hablar ahora de esto? ¿No podríamos olvidar este penoso incidente? Pues no, porque esta película les gustó, y los que ahora disimulan e intentan volver la cabeza hacia otro lado son como los que se obstinan en olvidar que alguna vez votaron a Zapatero (es verdad que éstos lo han hecho todo mucho más deprisa). Ahora resulta asombroso que la película les gustara, lo sé, pero debemos ser conscientes de que somos meros títeres cuando hay fuertes corrientes emocionales en juego. Y la corriente del momento se encarnaba a la medida en Robin Williams. Es imposible entender esta película sin la existencia de Robin Williams. El club de los poetas muertos es Robin Williams. Hubo un momento en que cuando, en cuanto aparecía en pantalla, el público estaba preparado para reconocer a un personaje excéntrico y simpático, repleto de autenticidad y valores (bien es cierto que estos nunca llegaban a concretarse), y el hechizo se mantuvo hasta la sonrojante película de Terry Gilliam «El rey pescador» (sí, sí, ahora tampoco se acuerdan de eso; tampoco se acuerda Jeff Bridges, pero ahí estaba).

Estamos en 1959 en la prestigiosa academia de Welton, donde jóvenes de la alta sociedad son preparados para entrar en las mejores universidades. La historia se centra en Neil, un chico cautivador y con capacidad de liderazgo pero sometido al poder dictatorial de su padre. Porque la película, en el mejor espíritu LOGSE, también trata de eso: de la sofocante autoridad de padres y profesores que extingue la creatividad de los hijos/alumnos (que tampoco llega a concretarse). Y así, echando un vistazo por la academia se nos presenta a los profesores convencionales (léase represores) impartiendo insufribles clases de trigonometría o declinando monótonamente en latín, a los que el profesor de literatura Keating (Robin Williams), que llega silbando y haciendo el tonto, sirve de refrescante contrapunto.

A partir de ahí todo funciona al revés. Keating no deja de repetir que quiere formar librepensadores y gente capaz de seguir su propio criterio, pero en realidad no para hasta crear una secta en torno a su persona. Para que no queden dudas, desde el principio insiste en que sus alumnos se dirijan a él como ¡oh capitán, mi capitán!, invocación que Walt Whitman había pensado dirigir, no a Keating, sino a Lincoln. Mientras Keating asegura que su idea de la educación es ayudarlos a pensar por sí mismos, comienza el adiestramiento de su tribu. En la escena más significativa de la película, ante el asombro tontorrón de los adolescentes, se sube a la mesa para demostrar su originalidad y su desprecio por las convenciones. A continuación exige que todos sus alumnos «librepensadores» hagan exactamente lo mismo. Y aún tiene la desfachatez, cuando están en ordenada fila subiendo y saltando de la mesa, de decirles que no sean lemmings. Conseguirá que lo sean. Para manosear las emociones de sus alumnos Keating emplea la poesía, a la que reduce a una sucesión de eslóganes a su mayor gloria. De este modo puede usar el argumento de autoridad de unos nombres prestigiosos para decir lo que él quiere. Así por ejemplo recita un poema de Robert Frost: «Dos caminos divergían en el bosque y yo tomé el menos transitado; aquello es lo que cambió todo». Lo que quiere decir Keating a sus alumnos parece claro: no sigáis el camino convencional y dejaos llevar por vuestro criterio (que es el mío), que será mejor para vosotros; no lo digo yo, lo dice Robert Frost. Pues bien, Frost no lo dice. Keating, de manera bastante desvergonzada para un profesor de literatura, se ha limitado a usar el primero y el último de los versos. En el poema completo el poeta parece más bien reconocer que era imposible saber en ese momento qué camino era el bueno, y que fue el azar el que determinó que la elección fuera afortunada. Y así todo. La poesía reducida a mensajes de una galleta china.

Keating ya tiene a sus alumnos marchando al son de su tam-tam, y Neil y sus compañeros deciden reconstituir «El club de los poetas muertos», una sociedad secreta, que el propio Keating creó cuando era alumno de Welton, dedicada a leer poesía en una cueva. Así que obedientemente Neil y sus amigos se dedican a hacer exactamente lo mismo. El resultado, como toda la película, es de una pavorosa superficialidad. Ahora déjenme pasar de puntillas por la secuencia de acontecimientos que sigue a continuación. Resulta que Neil ha descubierto de repente que la pasión de su vida es participar en una pequeña función teatral de pueblo; su padre, no menos desaforado, decide meterlo en una academia militar para que aprenda; Neil se suicida; el padre se lamenta a cámara lenta. Penoso. Y, claro, la escena final. Keating es despedido de Welton (normal) por haber sobreexcitado a unos adolescentes, y al marcharse sus alumnos se ponen de pie sobre la mesa y dicen con emoción «oh capitán, ni capitán». ¿Realmente era necesario? En fin, al menos ahora sabemos qué quería decir el director con lo de los poetas muertos: con los vivos nunca se habría atrevido. Un detalle final. Estamos en 1959, andan sueltos Kerouac, Ginsberg y Burroughs, y pronto se les unirá Kesey. La generación beat está a punto de brotar. ¿Cuánto tiempo tardarán estos niños influenciables en acabar en una comuna?

Acerca de Santiago González

Periodista. Columnista de El Mundo. Ha publicado "Un mosaico vasco" (2001), "Palabra de vasco. La parla imprecisa del soberanismo" (2004), "Lágrimas socialdemócratas. El desparrame sentimental del zapaterismo" (2011) y "Artículos 1993 - 2008" (2012). Premio de Periodismo El Correo 2003.
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143 respuestas a Películas francamente sobrevaloradas (1)

  1. Gran acierto, Navarth. Esta película está muy sobrevalorada. Confieso que me gustó cuando la estrenaron pero la segunda vez me superó. Y cada vez que se dirigen hacia mi persona con «oh capitán, mi capitán» me hace recordarla.
    Dejando a un lado a Robbin Williams tenemos dos actores que años más tarde han brillado y brillan en series de televisión: Robert Sean Leonard como el doctor Wilson en House y, sobre todo, Josh Charles en su papel de Will Gardner en The Good Wife.
    Muy buenos días.

  2. Pussy Cat dijo:

    Ay, que bueno, Navarth. Este verano promete mucho, ¡menudo comienzo!
    Lo confieso: Moi aussi caí en las redes de esa inanidad y me sorprendí mucho al oír a Savater que iba a fundar un club de enemigos de El club de los poetas muertos. Me pareció injusto en su día, pero cuando años más tarde la revisé, menudo susto, era cursi, tramposa pretenciosa sin remedio.Hay quien supo verlo en el primer momento, que tíos. En mi descargo diré que yo solita nunca he soportado a Pablo Cohello, y desde el principio. Esas frases insoportables que se me aparecen en adornados recuadros en el facebú, son tan mentirosas como El club… no siempre estuve equivocada.

  3. luigi dijo:

    Cine de Verano: Navarthe y Ensayo.

  4. arcu dijo:

    No vi la película (¿seré el único?) pero muy interesante su crítica/exposición, D. Navarth. Gracias.

  5. candela dijo:

    Qué buenísimo, NAVARTH.

    Casi me han entrado ganas de volverla a ver para disfrutar de la pretenciosidad tramposa que no supe ver en su momento. Y eso que detestaba a Robin Williams.

    Una noticia buena, he mejorado una barbaridad desde entonces y, otra mala, era bastante imbécil, la verdad.

    Buenos días.

  6. Otto Silenus dijo:

    Magnífica entrada. La película es very, pero que very embarrassing.

  7. Pussy Cat dijo:

    Candela, usted nunca pudo ser ni un poco imbécil. Solo era falta de datos…

  8. yapoco dijo:

    Doña Pussy Cat se me ha adelantado al escribir lo primero que también se me ocurrió al leer hoy el blog: este verano promete . Navarth el ameno regalándonos sus críticas cinematográficas, en las que con una aparente sencillez (qué fácil parece escribirlas así, ja) es capaz, en cambio, de advertirnos de la manipulación de unos versos de Frost por parte del protagonista. De Frost, cuyo nombre sólo me sugiere langostinos congelados.
    Habrá que conformarse con una crítica cada dos días, para no exigirle demasiado. Bueno, cada tres (¿cada cuatro?¿tanto tiempo de espera?)
    En fin, gracias por estas aportaciones.

    Y les recuerdo que en el blog de Navarth, entre otros apartados hay uno dedicado a críticas cinematográficas que ha ido recopilando durante estos últimos años. Sobra decir que es totalmente recomendable echarle un vistazo (como al resto del blog, obviamente).

    Mi aportación al tema de hoy: la peli me resultó entretenida, aun no siendo muy partidario del excesivo, ya entonces, Williams.

  9. ZEPPI222 dijo:

    Estimado Sr. González,

    Llevo siguiendo su blog, con intervenciones esporádicas, durante varios años. En general, coincido con la mayoría de las opiniones de los participantes, aunque no termina de gustarme la gran unanimidad reinante, creo que un poco más de diversidad en las opiniones, y en la forma de expresarlas, le daría más vitalidad al blog. Pero no acabo de entender porqué ha decidido no publicar mis comentarios de respuesta al artículo de Gistau. Evidentemente, usted lleva el blog como cree conveniente, y está en su derecho e publicar o no mis comentarios. Le agradezco los que me ha publicado en el pasado y le agradecería que me indicara qué regla o norma de educación he infringido con ellos, pues me gustaría seguir participando esporádicamente cuando considere que el asunto lo merece. No soy un troll ni un tocapelotas, algunos remeros como El Richal me conocen de singladuras anteriores y pueden dar fe de mi buena sintonía con la mayoría de las opiniones aquí vertidas.

    Atentamente

    Zeppi222

  10. Lindo Gatito dijo:

    Un 10, Navarth. No voy a hacer pública la confesión que le hice en privado sobre ese engendro (que tiene, sin embargo, alguno de los llamados «momentos cumbre»… pero claro, una pequeña elevación donde todo es depresión puede parecer altura), pero otra de las cosas que destacaría es que Walt Whitman no fue animado a ser leído por esta peli, quedando como un icono sin ningún valor. Así, tantos invocan el poema «¡Oh, capitán, mi capitán», sólo por esos primeros versos, sin habérselo leído. Whitman lo compuso en memoria de Abraham Licoln y no es una elegía de gloria, sino de tristeza funeraria.

    Supongo que habrá muy buenas traducciones a ese poema (aunque, claro lo mejor es entenderla en su idioma original… y con el nivel adecuado). A mí me gusta mucho la de Francisco Alexander, en la edición de Mondadori:

    «¡Oh, Capitán! ¡Mi Capitán! Terminó nuestro espantoso viaje,
    El navío ha salvado todos los escollos,
    hemos ganado el premio codiciado.
    Ya llegamos a puerto, ya oigo las campanas,
    ya el pueblo acude gozoso.
    Los ojos siguen la firme quilla del navío resuelto y audaz.
    Más, ¡oh, corazón, corazón, corazón!
    ¡Oh, las rojas gotas sangrantes!
    Ved, mi Capitán en la cubierta
    yace frío y muerto.

    »¡Oh, Capitán! ¡Mi Capitán! Levántate y escucha las campanas;
    Levántate, para ti flamea la bandera, para ti suena el clarín,
    para ti los ramilletes y guirnaldas engalanadas,
    para ti la multitud se agolpa en la playa,
    a ti te llama la masa móvil del pueblo,
    a ti vuelve sus rostros anhelantes;
    ¡Ea, Capitán! ¡Padre querido!
    ¡Que tu cabeza descanse en mi brazo!
    Esto es un sueño: en la cubierta yace frío y muerto.

    »Mi Capitán no responde, sus labios están pálidos e inmóviles,
    mi padre no siente mi brazo, no tiene pulso, ni voluntad.
    El navío ha anclado sano y salvo; su viaje, acabado y concluido,
    del horrible viaje el navío victorioso llega con su trofeo;
    ¡Exultad, oh playas, y sonad, oh, campanas!
    Más yo con pasos fúnebres,
    recorro la cubierta donde mi Capitán
    yace frío y muerto.»

  11. Quizás gustó porque dramáticamente sí que está bien elaborada, creo, y la carga dramática y emocional de las escenas tiene una lograda expresividad que además en Williams se encarna como guante en mano. Puede que también la peli refleje bien esa necesidad íntima de «matar al padre» y de forjarse «mitos» sustitutivos que en muchos adolescentes con ínfulas «artísticas» parecen darse. En Billy Elliot el hermano pequeño le pregunta al mayor, minero ya: ¿oye, tú también a menudo piensas en la muerte? Y con eso ya sabemos que es un artista adolescente, Joyce dixit.
    saludos

    “¿Y Albert Rivera? ¿Y Santi Abascal?” en…
    http://elblogdejoseantoniodelpozo.blogspot.com/

  12. luigi dijo:

    Los Paraisos Artificiales: El club de los poetas puestos.

  13. Jose dijo:

    Pues viene como anillo al dedo este vídeo de Pablo Iglesias haciendo de profesor Keating, no tiene desperdicio:

  14. Conde de Toreno dijo:

    Buenos días, Patrón y señoras y señores argonautas.

    Las orejas, el rabo, vuelta al ruedo y pùerta grande para Don Navarth.

    Yo también la vi con los dieciocho y la segunda vez, ya treintañero, me pregunté cómo me deje tomar el pelo así siendo ya, como sigo siendo, un fan de John Ford y Billy Wilder. Es que lo de la juventud y la inexperiencia se curan con la edad, al menos a algunos.

    No creo que haya tercera.

    «Un detalle final. Estamos en 1959, andan sueltos Kerouac, Ginsberg y Burroughs, y pronto se les unirá Kesey. La generación beat está a punto de brotar. ¿Cuánto tiempo tardarán estos niños influenciables en acabar en una comuna?»

    Malicio que puestos hasta las cejas de LSD.

  15. Gandumbas dijo:

    Yo sí vi la película y la odié desde el primer momento. Quizás porque era profesor en un Instituto del extrarradio de Madrid y conocía el paño. En aquellos años se estaba gestando la LOGSE y los que éramos jóvenes, pero no gilipollas, temíamos lo que se nos venía -y se nos vino- encima. Lo que más me irritó de la película fue comprobar que mucha gente pensaba, en 1989, que aún seguíamos en 1959. Es decir, que el paradigma de la educación en España seguía siendo el de una enseñanza autoritaria, ineficiente y castradora, cosas que por cierto nunca fue, y que se necesitaba un cambio. Lo que la gente no veía es que las cosas ya habían cambiado desde los años 70 y que el modelo de profesor y los métodos pedagógicos en uso ya eran el modelo Keating. Los institutos ya llevaban años siendo «decorados» con espantosos murales realizados por los alumnos peor dotados para las artes plásticas; el tuteo entre profesores y alumnos ya se había generalizado; las corbatas eran ya una reliquia en los cláustros; los institutos pasaron a tener nombres como Dolores Ibarruri, Victoria Kent, Manuel Gutiérrez Aragón o, cómo no, Carpe Diem; profesores que se subían a las mesas, conocí a varios. Es decir, que en pleno triunfo de la enseñanza «democrática, lúdica y no competitiva» que le habría encantado a Keating, viene la película a proponernos un modelo que, desde antes de la LOGSE, ya hacía aguas. Luego vino la LOGSE para institucionalizar aquella revolución, como el PRI mejicano. De aquella «primavera democrática» ha quedado lo peor: a los claustros los han puesto firmes, y cualquier inspector te puede sodomizar sin tener el detalle de pagarte antes una copa. Pero, por lo demás, el cachondeo ha ido a más y el sistema educativo a menos.

  16. Omar Jayyam dijo:

    Buenos días a todos:

    Yo guardaba muy buen recuerdo de esa película –que me llevaron a ver ¡mis profesores!– hasta que la revisioné hace un par de años. Me pareció vacua, sobreactuada y chorreante de sentimentalidad adolescente. Lo que no se me había ocurrido es que Keating fuera un epígono de Charles Manson.

  17. Con algunas películas me pasa, después de haberlas visto, que cuando leo una crítica positiva me queda la sensación de que la peli fue bastante rollo y cuando leo una crítica negativa entonces pienso que fue un buen film. Con esta me pasa eso.

  18. compas1967 dijo:

    Mea culpa, mea culpa, mea máxima culpa. Yo también caí , tenía veinte años y los actores eran muy guapos. Años después me parece infumable, como mucho para disfrute de adolescentes. Gracias D. Navarth, espero las siguientes con impaciencia.

  19. Lehningen dijo:

    Yo la ví acompañado por una novia que tenía en aquella época y a la que le gustó mucho. Por tanto no tuvo más remedio que gustarme a mí también, pero le ví el truco a la primera. Ante películas como esta yo siempre actúo como Clint Eastwood en «The Outlaw» en una escena en la que está acompañado por Sondra Locke: ella está mirando el cielo y le dice «las nubes son sueños flotando en el azul de la imaginación». Él se la queda mirando con esa mirada que Clint Eastwood tiene cuando mira como Clint Eastwoos y el dice: «jamás se me ocurrió pensar una cosa así».

  20. Esfinge dijo:

    Leer al maestro Navarth me ha producido dos vivos sentimientos: admiración y vergüenza, debida ésta a la impresión de sentirse descubierto en paños menores (emocional e intelectualmente hablando). Cómo pudo emocionarnos «eso», qué hizo que nos identificáramos con el personaje de Robin Williams, es algo que envenena mi autoestima (aunque saberse en la compañía de algunos remeros alivia el dolor).

    En mi caso he de añadir el agravante de que soy muy partidario del latín y de la trigonometría. ¡Hasta tal punto nos puede manipular una histori(et)a bien llevada!

    Podría ser peor. Podría haber votado a Pujol.

  21. navarth dijo:

    Muchas gracias, es un placer escribir críticas para un público tan amable. Les recuerdo, por si alguien se ánima (o sencillamente se quiere vengar de mi crítica; una pista, a mi me encantó El paciente inglés que algunos consideran una lata), que esta convocatoria fue pública.

  22. A mi la película no me gustó mas que nada por el tontainas del profesor Keating, un singorgo de marca mundial como ha venido demostrando en todas sus películas y eso que una ambientada en cualquier College de uno de los seis estados de Nueva Inglaterra siempre me pone. Hombre, elegir Vermont tiene su aquel pero ¿quién no comete algún pecadillo?

    Yo la tengo catalogada en la sección Peliculas Vistas, sección tercera: a olvidar.

    Y buenos días a todos incluso a Enric Juliana que no tiene a bien mostrarse ante los humanos. Supongo que está en el momento «espumarajos por la boca» y un tipo cómo él vigila su imagen. Vamos a darle un par de días más a ver si se hace carne entre nosotros al siguiente día de la cita en Moncloa del conseller de Hacienda en tiempos de tribulación, digo, de tributación.

  23. eltumbaollas dijo:

    Gracias Navarth,
    ya tengo para ruimiar…

  24. eltumbaollas dijo:

    rumiar, mejor

  25. Marco de la Fresange dijo:

    No la vi cuando se estrenó. El tal Robin William no es una actor que esté en la lista de mis preferidos; años más tarde, en la TV, intenté verla, a mi «santa» le parecía hermosa, y no pude con ella. Me pareció cursi sin más.
    El análisis que hace me parece extraordinario y muy acertado. Reconozco que ahora, leída la crítica, lo veo con claridad meridiana.
    Gracias.

  26. loco dijo:

    Dejo , para un valiente, una sugerencia guapa: Leolo Lozone.

  27. luigi dijo:

    ARGOS. Cine de Verano: Alguien sobrevaloró el cine del culto.

  28. Fernando dijo:

    Fernando
    Yo difiero, tengo una excelente opinión del blog y de su sostenedor , pero creo, en este caso, que es demasiado duro con el film ya que se le puede dar otra lectura diferente a la que el hace. La he usado en mis clase de universidad, soy pedagogo, y puede ser enfocada en el sentido de que un profesor puede ayudar a sus alumnos a ser críticos, a pensar por su cuenta y a no seguir por una disciplina rígida a no tener criterio propio, y que hay valores humanistas en la literatura y poesía diferentes a como otros enseñan las humanidades.
    La sobre actuación de William es obvia pero quizás el director permitió esos excesos sabiendo que el actor era un reclamo.
    Sin qué sea una obra maestra como dicen algunos el film tiene elementos positivos, ni tanto como dicen algunos ni tan poco como señala el sr. González

  29. Penalty y Expulsión dijo:

    No soy cinéfilo. Tengo otros vicios por los que don Vicente Torres me vitupera. Y así descubro que Anasagasti es el único venezolano que no se ha enterado de que Juan Carlos I abdicó,

    Falto de imaginación, dice de Pujol, el jefe del clan de los pujolines, que no se entiende como se puede empañar una trayectoria tan al servicio de una causa por mero interés económico. Ni él ni su señora lo harían. Perderían la sopa boba que vienen sorbiendo desde hace décadas.

  30. envite dijo:

    Genial, Navarth!!!
    Leo con avidez sus críticas cinematográficas. Son divertidísimas!!!
    Y sí, la peli estaba ya un poquito pasada en su día. Pero, como ejemplo de manipulación, creo que está más que vigente. En fin.
    Claro que promete el verano!
    Gracias!!!

  31. Andoni dijo:

    Pues, a mí me gustó. Pero claro, siempre tiene que haber algún garbanzo negro en toda familia que se precie.

  32. stiffelio (@eagarpar) dijo:

    Pues aunque muchos dirán que lo hago para contemporizar, querido D. Fernando, lo cierto es que cuando me llevaron a ver esa cosa al cine me salí a los 20 minutos. Me ha pasado, creo, con 3 películas a lo largo de mi vida. Soberano coñazo, cursi hasta decir basta. No tenía ni idea de cómo se desarrollaba ni de cómo finalizaba hasta hoy, que lo leo en su artículo. Créame.

    Mis felicitaciones!!

  33. Lindo Gatito dijo:

    Lehningen (12:31 pm), ¡genial! Qué respuesta demoledora en su aparente asepsia. Eastwood tal vez recordaría esa frase con gratitud a su guionista porque estuvo casado con Sondra Locke (y por eso ella iba de actriz, que si no, de qué…) y su divorcio de ella le costó un pastón que casi le dejó en la ruina. Pero él siguió haciendo un cine memorable. Ella no.

    La verdad es que las pelis de Eastwood (estén dirigidas por él, por Don Siegel –su mentor, en cierta forma; le dio un pequeño papelito en su primer film, Play «Misty» for me— o por Sergio Leone) están llenas de frases memorables, cínicas y dinamiteras; v. gr.: «»Alégrame el día»»

  34. Babayagá dijo:

    D. Navarth, muy buena elección, y excelente crónica.

    D. Lindo muchísimas gracias por la traducción que nos envía. Conmovedora.

    No se mortifique nadie, éramos entonces jóvenes, felices e indocumentados, tomando la frase de G. G. Márquez. Solo que por aquella época ya debía estar empezando a maliciarme algo, ya que no vi la pelicula. Nunca me he arrepentido.

  35. valdi63 dijo:

    No me gusta Robin Wiliams. No he visto la película porque él trabaja en ella, pero ahora voy a verla

  36. viejecita dijo:

    ¡ Que gozada Don Navarth
    Muchas gracias
    A mí la película, que vi cuando se estrenó, me pareció falsa, ñoña, y cursi ( más que un repollo con lacios ). Pero es que a mí la poesía no me suele poner nada, y además, es que soy mucho mayor que la mayor parte de ustedes, y esa película me pareció un remake infumable de «Es grande ser joven » una película que vi en mi primer año de colegio, a los 13 años, y que sirvió como empujón para una protesta en toda regla, con las chicas cantando ¡ Justicia, justicia !, contra las monjas, como en la película, en defensa de algo o de alguien, que ya no recuerdo, y que supuso la expulsión temporal de varias chicas .
    Esa película es mucho más antigua, y es inglesa, y el detonante de la historia es que el nuevo director del colegio quiere suprimir ensayos y financiación de la orquesta del colegio, y el profesor de música se le enfrenta, y acaba expulsado del colegio… Y los alumnos sacan los instrumentos a la calle, y tocan, cantan y bailan para conseguir financiación, y luego se encierran en el aula de música, mientras el resto del colegio les lanza comida para que no desfallezcan …
    Y en vez del insoportable Robin Willians, el profesor rebelde es John Mills… Y la película acaba bien, con el Director y John Mills a hombros de sus alumnos…
    Yo la he vuelto a ver hace poco, ( me he tenido que comprar una colección de películas antiguas de Mills para conseguirla en DVD ), y la he vuelto a disfrutar enormemente. ( y, entre los alumnos, el más joven de los «músicos» es ese chico que de mayor hizo aquella serie de «el nido de Robin»…) Ya me gustaría poderles poner la película entera, pero en Y.T. sólo he encontrado esto

  37. luigi dijo:

    La LOGSE: El Plan Maestro.

  38. Urbi et Orbi dijo:

    Sin haber visto la película creo poder asegurar que su calidad está muy, muy, muy por debajo de la crítica de don NARVATH. Estupenda, maestro.

    Lo que nos cuenta don GANDUMBAS (11:42 am) no puede ser más cierto. En mi caso, tuve una profesora de matemáticas (año 1979, 2º de BUP) que se hacía la colega más chupiguay del mundo: nos bajaba al patio a dar las clases, sustituía la lección del día por la audición de un disco de Emerson, Lake and Palmer, y así. Resultado: arrastré unas carencias matemáticas que me hicieron sudar tinta el resto de mi etapa académica. «Pero, por lo demás, el cachondeo ha ido a más y el sistema educativo a menos.«, redondo, don GANDUMBAS.

    ****************
    Como veo que don T&T (12:46 pm) sigue atacao de los nervios con mosén Juliana copio aquí lo que puse en la cubierta anterior, para tranquilizarle en lo posible:

    De la noticia de EM enlazada por ISLATORTUGA:

    Anticorrupción ha abierto diligencias contra Oleguer Pujol, el hijo pequeño del ex presidente autonómico Jordi Pujol, por el posible blanqueo de dinero en operaciones inmobiliarias por un valor próximo a los 3.000 millones de euros.
    …..
    Dado su carácter conflictivo [de Jordi Pujol hijo] -agresiones a su ex novia incluidas-, que le ha llevado a estar en tratamiento, el patriarca optó hace casi una década por ceder el control de las finanzas a Oleguer, al que considera “el más listo, preparado y sensato” de sus siete vástagos.

    Así, los últimos serán primeros (Mateo 20:16)

    Don T&T: ¿ve como hay mimbres para que la próxima homilía sea de las que marcan época? No lo dude, mosén Juliana le recompensará con creces los malos ratos vividos durante la larga espera.

  39. Chigorin dijo:

    Ésta la he visto. Pero la debí de clasificar en el mismo apartado que Don T&T, porque no me acuerdo de nada. Bueno, sí, que se subían a las mesas para tener otro punto de vista. Pues vale.

  40. Nodoycredito dijo:

    Al hilo de la sobrevaloración de algunas películas, he recordado que hace años escuchando un programa de cine, del cual no recuerdo ni el nombre, entró en antena un oyente para proclamar su pasión por el séptimo arte:

    – ¿Y cual es su película preferida?, le preguntó el locutor intrigado.
    – «Ghost».

    ¡Por Dios Niles! que diría Frasier.

    Muy bueno Don Navarth.

  41. Trampantojo dijo:

    Muchas gracias, D. Navarth, por su entrada. Muy buena crítica (el emperador iba desnudo…).
    Cuando vi la película, en su estreno, no me disgusto: era joven. Hace poco la volví a ver y “aguante hasta el final” para darme cuenta de cómo es de manipulable la juventud y lo mayores que nos creíamos y que cruditos estábamos.
    Y en respuesta a la pregunta final, “¿Cuánto tiempo tardarán estos niños influenciables en acabar en una comuna?”, los chavales no sé pero, el “profe guay”, terminó de Peter Pan adulto en la película Hook. No digo más.

  42. Feroz dijo:

    Buenas tardes.

    Yo la vi cuando la estrenaron, pero no me acuerdo de casi nada. La escena esa de los chicos subidos en las mesas no la recordaba, pero creo que se metían en una cripta, o sótano para darle un aire más misterioso a sus conciliábulos poéticos. En fin, que lo de que la juventud sea manipulable es viejo como el mundo.

    Por cierto, la sinopsis de esa película me ha hecho pensar en «El club de los políticos muertos» que fundó recientemente otro profesor contestatario en el campus de Somosaguas, aunque éste no ha sido despedido de su trabajo ya que el rector de la Complu quiere ficharle a perpetuidad. A diferencia de la de Hollywood el argumento de la «película» española entra en la categoría de terror.

  43. Lehningen dijo:

    Es usted muy amable, Don Lindo Gatito (1:32 pm).

    Cuando pasé de la EGB al instituto (año 1983)… ¡fumábamos en las aulas! Es cierto que yo tuve que entrar en turno nocturno porque tenía que trabajar y eso hacía que en el aula hubiera gente mayor, pero aún así, los que estabamos en nuestra edad fumábamos igualmente. Los profesores eran colegas, sí. Incluso los que no lo eran se dejaban arrastrar por aquel libertinaje. Pero tuve la inmensa suerte de que dentro de su coleguismo eran gente seria que adoraba su trabajo y estaban dotados para ello, por lo que tuve una enseñanza de calidad mayúscula. En aquella época los profesores de bachillerato que daban clase al nocturno lo hacían de forma casi voluntaria, lo cual era injusto para ellos pero nos garantizaba a los alumnos la ausencia de mediocres y de gente sin vocación. Gracias a ello tuve una enseñanza privilegiada que para sí hubieran querido los del turno diurno.

    Me gusta la línea iniciada por el Sr. Navarth. Espero ansiosamente la entrada de «La muerte en Venecia»

  44. Bartók dijo:

    Qué vergüenza D. Navarth! Yo incluso me compré el libro.

  45. Richal dijo:

    -Richi vamos al cine, echan una de poetas muertos, y me ha dicho la Sole que es mu bonita.
    -¿poetas muertos?…promete… tiene que ser buena
    -/…/
    -Vane ya le puedes decil a la Sole que no entiende de cine, una peli de poetas muertos ande no sale un profe loco con una metealleta y se carga 500 poetas es una mierda de pilicula.
    – pues yo he llorao
    -Vane, tu lloras hasta con la Belén Esteban

    Y esto ea lo que me pasó con este coñazo de pilicula

  46. Don Urbi, disculpe la ausencia de contestación a su entrada de ayer pero ese silencio me pesa como una losa y estoy entregado en el diván de mi psiquiatra donde he recalado para pasar el trance. Creo que hay mimbres pero no confio en la recompensa. Creo que hemos perdido a Juliana. Que va a ser de nosotros sin un editorial único sobre el valor, qué digo, el coraje, el heroísmo del padre de la patria – bueno, hijos ha aportado el amigo – en el trance de reconocer que la entrega, la pasión, el desvelo del amanecer estelado no le permitió pensar en aquello que papá le dejó en previsión de un descalabro? Y porqué buscar el tiempo, esos minutos basura, para entregarlo a cumplimentar un formulario que había sido pensado en español, castellano para el, y que no tenía la sensibilidad poética y cantarina del catalán para llamar a la cuota devengada, cuota devengat?
    Una nación no se construye entre el formulario modelo 111 y el modelo 303. Donde queda la épica? Y ese es el camino y la actitud, dirá Juliana con la prosa forzada del hombre que vive y siente en catalán pero habita en lo que, qué recuerdos, llamaban los cantautores catalanes el circo fijo de Castilla.

  47. repanocha dijo:

    Estupenda y refrescante entrada, D. Navarth. Mil gracias.
    Yo no veo películas de, con, para, por Robins Williams (ni bajo, por supuesto, me apresuro a aclarar). Me provoca una grima irreprimible.
    Si no recuerdo mal, ésta me la tragué, con unos cubatas, en un vuelo transoceánico; no era cuestión de salirme a la mitad, como D. Stiffelio. No me gustó nada, me pareció falsa e impostada y el mensaje, una vacuidad disfrazada de enjundia modernizante.
    No es que sea más sabia que ustedes, sólo es que me pilló más vieja… y que los cubatas gratis me agudizan la vista.

  48. Richal dijo:

    El Clin Isgu si que hacía piligulas güenas

  49. Gracias, D. Navarth. Yo creo que la vi hace unos años en la tele con mi mujer, que por ese corazón de oro que tiene estaba de parte del rebelde que se enfrenta en desigual lucha (no he dicho épica) contra el establishment (así en inglés que suena mas moderno), pero este cura a los 20 minutos se puso a hacer sudokus.

    Visto que D. Navarth es un crítico sensato, dice malo a lo malo y bueno a lo bueno, me pasaré por el apartado cinematográfico de su blog que no conocia. A mi me gustaban las críticas de cine que escribía en la Gaceta Ilustrada D. Julián Marías QEPD. Me acuerdo de una sobre Yakuza, con R. Mitchum y un gran actor japonés, que gracias a él vi y me gusto mucho.

  50. luigi dijo:

    Aquella vieja pedagogía: Quien bien te quiere, te hará aprobar.

  51. Pues a ver si alguien se atreve con la película que me proporcionó el mejor sueño de los vividos en una sala de cine (Alphaville de Madrid) y que se llamó El contrato del dibujante del director Peter Greenaway y música de Michael Nyman.

  52. jarabe dijo:

    A la paz de Dios desde el cálido sur del Kalifato.
    No es por fastidiar, pero ya puestos, a ver si hay algun remero que me haga la crítica de una novela que no he conseguido terminar jamás de los jamases. Se trata de «Rayuela» de Jorge Cortázar.
    Nacesitaría un certificado de haberla leído entera, o en su defecto manifestaré la misma credibilidad que deposité en el honorap`la cuando juraba y perjuraba que no tenía nada en Suiza…

  53. jarabe dijo:

    Se me olvidaba dar las gracias a D. Navarth por su magnífica exposición sobre la película del actor que mas sobreactuaciones ha repetido.

  54. Ramius dijo:

    Mi reino por mi post. (espero que la zona horaria sea inocente…)

  55. Ramius dijo:

    Pues no. La culpa es del navegador. Alegaba este humilde comandante en su descargo, que ni ha visto la película, ni soporta a Robin Williams ni en pintura.

  56. Chigorin dijo:

    Concuerdo, Don Jarabe. Y había quien se la leía en desorden y todo.
    Otra confesión, ya que estamos: Mi libro imposible es «El Gran Meaulnes» de Alain-Fournier.

  57. Ramius dijo:

    Diría que el colmo de las sobreactuaciones de Williams que he sido capaz de soportar es aquella en la que interpreta(?) a un androide. Partiendo de una trama con la que se podrían hacer maravillas, acaba en un pastel con 200 toneladas de sacarosa por centímetro cúbico.

  58. Feroz dijo:

    Con permiso, me salgo del cine. Yo tengo también «mis clásicos», como D. Penalty.

    La conjura populista.

  59. Feroz dijo:

    D. Ramius, lo más gracioso de esa película (visto en la actualidad) es que cuando «se humaniza» acaba con un peinado como el de Berlusconi.

  60. Penalty y Expulsión dijo:

    Gracias, don Feroz, que yo estaba fuera del cine vendiendo palomitas.
    «¿Qué coño es la UDEF?»
    Quizá ahora se lo expliquen.
    Detenidamente.

  61. luigi dijo:

    Esta moderna pedagogía: Quien bien te quiere te hará probar.

  62. Feroz dijo:

    Lo mejor de esta historia es lo que nos podemos reír:

    Al ser preguntado de nuevo sobre el tratamiento que recibirá ahora Jordi Pujol y si éste había renunciado voluntariamente a ser tratado como “muy honorable” Homs ha asegurado que “ha renunciado a todo, y cuando digo todo es todo”.

    Es que si siguen llamándole «Molt honorapla» al tío Jordi, va a parecer que se cachondean de él, porque todo el mundo pensará en la traducción calabresa. De todos modos, creo que esa debe ser la sinecura que menos le preocupa perder a Pujol, lo de la pasta que cobraba todos los meses es otra cosa, y menuda se habrá puesto la señora Ferrusola.

  63. jarabe dijo:

    Don Chigorin, para mi otro que tal baila es el Ulyses de JJ…y El lobo estepario…ver tantas páginas sin un punto y aparte me sigue deprimiendo. Para mi es insufrible.

  64. SantiagoJacobo dijo:

    Don Jarabe, el gran JULIO Cortázar fue de lo mejor del boom. Tal vez no por Rayuela sino por sus relatos, que son obras maestras casi todos. Leí Rayuela hace más de treinta años y todavía recuerdo sus personajes y peripecias. Creo que no cabe mayor elogio para una novela.

  65. loco dijo:

    Si se me ponen clasicos y buscan cosas insufribes aten esta mosca por el rabo: Gritos y susurros.

  66. Yomismo dijo:

    Tan manipulable es la juventud. ¿Y por qué creen ustedes que los partidos políticos hablan tan bien de ella?

  67. Conde de Toreno dijo:

    Las 18.47, para desesperación de los argonautas mosén Juliana y Su Eminencia el cardenal Sistach siguen, salvo error u omisión mía, en ausencia clamorosa. Su Eminencia además sigue muy preocupado por el precio de los fichajes del Madrit pero no dice nada del del coste y trampantojos fiscales anexos de los del Barça. Creo que en los Evangelios se dice algo de un sepulcro blanqueado por fuera lleno de inmuncicia por dentro, pero el que se supone conoce bien esos textos es Su Eminencia.

    De la serie «padre yo me confieso», a mi Robin Williams y su histrionismo sólo me convencen tras un segundo visionado en Good Morning Vietnam. Y creo que la banda sonora me evita fijarme mucho en él.

    Don Lindo, es que el gran Clint Eastwood viene del Hollywood clásico y se le nota en todo.

    -No quiero líos como los que tuvo el año pasado en el barrio de los negros, inspector Callahan, esa es mi política.

    -Si veo un tipo que intenta violar a una chica yo le pego un tiro, esa es mi política.

  68. Lindo Gatito dijo:

    Concuerdo con SANTIAGOJACOBO (6:42 pm). Tengo para mí que uno de los más grandes relatos jamás escritos (esto es un deja vu… ¿no he escrito esto antes?) es La noche boca arriba. Merece la pena dedicar unos minutos a leerlo. Es cortito. Y demoledor.

  69. Conde de Toreno dijo:

    El Molt Justiapla acepta comparecer en el parlamentito catalanista.

    Como Franco cuando se reunía con el Consejo Nacional del Movimiento que, a decir de Pemán, servía para reunirse una vez al año para recibir el consejo del aconsejado.

    «Tras el anuncio de buenas intenciones de Pujol, «fuera de cobertura» desde el pasado viernes, Mas adoptó un tono entre íntimo y compungido: «Son decisiones que comunico con gran dolor personal, pero como presidente del país he de decir que esto es lo que hay». A partir de ahí activó su fibra sensible y tras calificar a Pujol de «mi padre político» dijo: «El dolor es muy grande, inmenso, siento mucha pena y también compasión. Puedo entender -prosiguió- que haya gente que no sienta lo mismo, pero yo siento una pena y un dolor muy grande».

    http://www.libertaddigital.com/espana/politica/2014-07-29/mas-informa-con-gran-dolor-que-pujol-renuncia-a-su-sueldo-y-oficina-1276524910/»

    A Arias Navarro la llantina le salía mejor.

    Y, a riesgo de ofender al Caudillet, me interesa que «eso de la UDEFFFFF» averigüe de dónde coño salieron los luengos maravedises con los que Ubú contribuyó a la «Construcción Nacional» de Andorra y Suiza.

    Ahora, que si libra acaban de inventar un nuevo argumento para convencer a la AEAT:

    – «Si yo querer quería, es que no tuve tiempo».

    Como todos somos iguales ante la ley en Estepaís nos valdría.

    ¿O no?

  70. Yomismo dijo:

    Y El Honorapla, en lugar de renunciar a todo lo que ha renunciado, no se limita a reponer todo lo que él y sus hijo han robado al país?
    (Si ellos afirman que nosotros les hemos robado tendremos nosotros derecho a decir que lo mismo nos han hecho ellos a nosotros).

  71. Roy Batty dijo:

    Buenas tardes queridos remeros,

    Primero, felicitaciones a D. Navarth por la entrada.
    No he visto esta película de Peter Weir. Probablemente he tenido ocasión, en la tele, en el videoclub… pero, por lo que sea, nunca me he animado a verla. No puedo opinar.
    Sin embargo, sí he visto y sí me han gustado mucho otras películas de este mismo director:
    – Master and commander
    – Único testigo
    – El año que vivimos peligrosamente

  72. hdayala dijo:

    Buenas tardes.
    me encuentro en la señorial calle serrano, haciendo tiempo para la mini reunión remeril que tendrá lugar en breves minutos.
    un pequeño paseo por aquí me refresca la tarde.

  73. SantiagoJacobo dijo:

    Don Lindo, gracias por el cuento.
    Aún me dura el deslumbre que me provocó El Ajolote. Terminé de leer y en seguida ¿Cómo lo ha hecho?, ¿Dónde está el truco? Y me puse a releer palabra por palabra para buscarlo.

  74. Temístocles dijo:

    Excelente crítica, don Navarth.
    El espíritu LOGSE se manifiesta con ínfulas liberadoras pero conduce al adocenamiento, a la incultura, sin la cual se carece de capacidad crítica, de herramientas que nos hagan realmente libres.
    Pero ese espíritu alimenta a muchos pedagogos al tiempo que manipula: se «retro alimenta» en un sentido literal.
    Para combatirlo yo he usado, curiosamente, la técnica de subirme sobre una mesa en clase, ¡pero de un salto y para fomentar la competitividad!
    También me han servido otras películas y sus frases notables, como:
    -«El mundo se divide en dos categorías…» (El Bueno a el Feo y el Feo a el Bueno) También para espabilar a los zánganos creados por el fantasma buenista.
    -Cuando lleguéis a la meta y suspendáis, algunos «sentiréis una punzada… es el orgullo, que os quiere ayudar (joder, en el original)» Esta frase es una pequeña variación de la proferida por Marcelus Wallas a Buch (Bruce Willis) en Pulp Fiction. Nuevamente, frase acicate.

  75. SantiagoJacobo dijo:

    José García Domínguez con la segunda parte.
    http://www.libertaddigital.com/c.php?op=opinion&id=73061

    (Lo siento, no sé cómo se crean hipervínculos decentes)

  76. Pues yo no he visto la película y leído lo que antecede tampoco la voy a ver. Pero me he tropezado con alguien que sabe chutar con ambas piernas y suele conducirme a la misma letrina, siempre a la misma «Penalty y Expulsión dijo:
    Martes, 29 julio 2014 en 1:18 pm
    No soy cinéfilo. Tengo otros vicios por los que don Vicente Torres me vitupera. »
    Pero ocurre que hoy he puesto en la Fiscalía de Valencia la misma que puso él en Cádiz, con mis datos, claro. Si alguien más se anima, puedo pasarle el documento.
    Isabel de Dios, desconocida para mí hasta hoy, hace un repaso de la actualidad:

    http://elsemanaldigital.com/la-mas-gorda-de-belen-esteban-los-fans-de-rahola-y-el-plan-de-podemos-136766.htm

  77. Andoni dijo:

    El club de los molt honorables muertos.

  78. Los cien curas de los cojones. Cuando Uriarte y Setién estaban a gusto.

  79. catcatcat dijo:

    En Cataluña siguen los mensajes navideños…

    La primera es regidora de ERC, para más señas.

  80. luigi dijo:

    El Espíritu de los Tiempos: LOGSÉ todo.

  81. kepaminondas dijo:

    Buenas.

    No vi la película y una vez leída la entrada de Don Navarth acerté. Seguro que hubiera salido del cine cabreado.
    Creo que la gili pedagogía al uso ha hecho un enorme daño. Casi tanto como Zapatero. O quizás Zapatero sea parte de la gili pedagogía.

  82. benjamingrullo dijo:

    Magnífica lectura de la película. Yo, claro, vi otra. Me ha sabido a poco, Navarth, y quiero más.

    Posible escena de manipulación de un profesor a sus alumnos:

    INT. SALA UNIVERSIDAD COMPLUTENSE. DIA
    El profesor Paul Txurtxes, en su clase práctica de agitprop dirige alumnos entrenados a reventar acto de pérfida política Rose Ten.

    El ejercicio vale para nota.
    Chica necesita que le den la señal. Negativo en espontaneidad revolucionaria.
    Pelota canta primera línea del cogudari. Positivo rojo.
    Los demás notable alto.

  83. Carlos A. Vegas dijo:

    Otro sobrevalorado…Bob Dylan

  84. Temístocles dijo:

    Genial, don Luigi

  85. kepaminondas dijo:

    Don Capitán, si se fija de lo que se quejan esos curas es lo que más merece ser aplaudido del obispo Munilla.
    El hombre parece un raro ejemplar de obispo vasco que cree en Dios y además se toma en serio eso de los mandamientos, todos, principalmente el quinto que dice algo así como «no matarás», prohibición taxativa interpretada con cierta benévola permisividad por muchos miembros del clero guipuzcoano en el que se incluye, naturalmente, algún obispo de infausta recordación.

  86. Notícia sobrevalorada en edició bilingüe dijo:

    Catalans … Pujol abandona els seus càrrecs, ven tot el que té, ho dóna als pobres i es retira a 1714.
    Catalanes… Pujol abandona sus cargos, vende todo lo que tiene, lo da a los pobres y se retira a 1714.

  87. rafawp dijo:

    ¿Habrá una entrega dedicada a El Piano?

  88. Si van a escribir reseñas de películas pretenciosas y que acaban siendo un tostón infumable, recomiendo la filmografía de Terrence Malick.

  89. ZEPPI222 dijo:

    D. Santiago,

    ¿Considera antisemita el artículo que publica Etgar Keret hoy en El País?

    Creo que en el fondo, he tratado de decir lo mismo, aunque probablemente no lo haya conseguido. Quizás a usted le parezca que Keret no es antisemita y yo sí, aunque esto se debe seguramente a que él es israelí y yo no, aunque digamos lo mismo.

    Reproduzco los entrecomillados de EP y el párrafo final, que suscribo casi por completo:

    “Hamás es un peligro para nuestra seguridad, pero ¿se puede decir lo mismo de las voces críticas?” (este es el quid de mi discusión con Jenny).

    “Es horrible cometer un error que cuesta tantas vidas. Es peor aún cometerlo una y otra vez” (esto es lo que opino sobre la ofensiva actual).

    “En las dos últimas semanas, hemos visto a extremistas de derechas que golpeaban con porras a izquierdistas, mensajes en Facebook que prometían enviar a los activistas de izquierdas a las cámaras de gas y ataques contra cualquiera cuya opinión retrasa el avance del ejército hacia la victoria. Resulta que este camino ensangrentado que va de una operación militar a otra no es tan cíclico como podíamos suponer. No estamos dando vueltas en círculos, sino cayendo por una espiral hasta tocar un nuevo fondo que, por desgracia, tendremos que experimentar.”

    Tan solo pretendo hacer ver que hay otras opiniones sobre la actuación de Israel en este conflicto, y que no necesariamente están dictadas por el antisemitismo. Y me parece que en un espacio de libertad como pretende ser su blog, las opiniones no deben ser censuradas (lo siento, no se me ocurre otra oalabra más suave) de forma tan evidente, sus colaboradores se merecen poder formarse su propia opinión, sin que nadie tenga que decidir sobre lo que pueden o no leer.

    Aquí le dejo el artículo completo, por si tiene a bien publicarlo, sin hacer referencia a nada anterior, si así lo desea.

    Reciba un cordial saludo.

    Pedir acuerdos no es sabotear la victoria

    En la última semana he visto y oído cada vez con más frecuencia la frase siguiente: “Dejad que gane el Ejército de Israel”. Se lee en las redes sociales, en pintadas sobre los muros, se grita en las manifestaciones. Muchos jóvenes la repiten en Facebook, y parecen creer que son unas palabras nacidas como respuesta a la actual operación militar en Gaza. Sin embargo, yo soy lo bastante viejo como para recordar que nacieron hace tiempo como una pegatina para el coche y han evolucionado hasta convertirse en un auténtico mantra. No es, por supuesto, un eslogan dirigido a Hamás ni a la comunidad internacional, sino a los propios israelíes, y encarna la distorsionada visión del mundo que guía a Israel desde hace 12 años.

    El primer error que se da por supuesto es que en Israel hay gente que está impidiendo que gane el Ejército. Esos presuntos saboteadores podemos ser yo, mi vecino o cualquier otro que ponga en tela de juicio la premisa y el propósito de esta guerra. Por lo visto, todos los bichos raros que nos atrevemos a hacer preguntas o poner en tela de juicio la conducta de nuestro Gobierno y atamos de pies y manos a nuestro Ejército con molestos artículos y llamamientos derrotistas a la compasión y la empatía somos el único obstáculo que separa a las Fuerzas Armadas de Israel de una victoria perfecta.

    El segundo error que implica el eslogan, mucho más peligroso, es pensar que el Ejército israelí puede verdaderamente ganar. “Estamos dispuestos a recibir todos esos misiles sin descanso”, se oye decir a habitantes del sur de Israel en los programas informativos, “mientras sepamos que vamos a acabar con esto de una vez por todas”.

    Doce años, cinco operaciones contra Hamás (cuatro de ellas en Gaza), y seguimos con ese enrevesado eslogan. Jóvenes que empezaban el colegio durante la Operación Escudo Defensivo son hoy soldados y participan en la invasión de Gaza. En cada ocasión ha habido políticos de derechas y comentaristas militares que destacaban que “esta vez tendremos que utilizar todos los recursos y llevarlo hasta el final”. Al verles en televisión, no puedo evitar preguntarme cuál ese final al que quieren llegar. Incluso aunque eliminen a todos y cada uno de los combatientes de Hamás, ¿de verdad alguien cree que la aspiración de los palestinos a la independencia nacional va a desaparecer con ellos?

    Antes de que existiera Hamás luchamos contra la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), y después, suponiendo y esperando que aún sigamos vivos, lucharemos seguramente contra otra organización palestina. El ejército israelí puede ganar batallas, pero la paz y la tranquilidad de sus ciudadanos solo se logrará mediante acuerdos políticos. Sin embargo, según los poderes patrióticos que dirigen esta guerra, eso es algo que no debemos decir, porque es precisamente lo que impide que ganen las Fuerzas de Defensa de Israel. Cuando termine la operación y se haga el recuento de los muertos, tanto en su bando como en el nuestro, el dedo acusador se volverá de nuevo contra nosotros, los saboteadores.

    En Israel, en 2014, la definición de discurso legítimo ha cambiado por completo. El debate está dividido entre los que están “a favor de las Fuerzas de Defensa de Israel” y los que están en contra. A los matones de extrema derecha que gritan “muerte a los árabes” y “muerte a los izquierdistas” en las calles de Jerusalén y al ministro de Exteriores, Avigdor Lieberman, que llama a boicotear las empresas árabeisraelíes en protesta por la operación en Gaza, se les considera patriotas; en cambio, las demandas de que se detenga la incursión o las simples expresiones de compasión por las muertes de mujeres y niños en Gaza son una traición contra la bandera y la patria. Nos encontramos ante la falsa y antidemocrática ecuación según la cual agresividad, racismo y falta de empatía equivalen a amor a la patria, mientras que cualquier otra opinión —en especial cualquier opinión que no fomente el uso de la fuerza y la pérdida de vidas de soldados— es nada menos que un intento de destruir Israel.

    A veces parece como si estuvieran librándose dos guerras. En uno de los frentes, el ejército lucha contra Hamás. En el otro, un ministro del Gobierno que llamó “terroristas” a sus colegas árabes en el Parlamento y unos vándalos que intimidan a los pacifistas en las redes sociales persiguen al “enemigo interior”: cualquiera que exprese una opinión diferente.

    No cabe duda de que Hamás constituye un peligro para nuestra seguridad y la de nuestros hijos, pero ¿se puede decir lo mismo de artistas como la actriz cómica Orna Banai, la cantante Noa o mi esposa, la directora de cine Shira Geffen, a las que se ha insultado de forma detestable y amenazadora cuando han hecho pública su desolación por la muerte de niños palestinos? ¿Las terribles críticas que han recibido son otro medio de defensa necesario para garantizar nuestra supervivencia, o un mero y siniestro estallido de odio y rabia? ¿Estamos tan debilitados y asustados que hay que acallar cualquier opinión diferente, para que no suscite amenazas de muerte no solo contra quienes la emiten, sino incluso contra sus hijos?

    Muchas personas han tratado de convencerme de que no escribiera este artículo. “Tienes un niño pequeño”, me dijo un amigo el otro día. “A veces vale más ser listos que tener razón”. Nunca he tenido razón, y tampoco debo ser demasiado listo, pero estoy dispuesto a luchar por mi derecho a expresar mis opiniones con la misma ferocidad con que las Fuerzas de Defensa de Israel luchan en Gaza. No es un combate por mi opinión personal, que puede estar equivocada o ser patética. Es por este lugar en el que vivo y al que amo.

    Esto no es nada nuevo. El 10 de agosto de 2006, hacia el final de la segunda guerra del Líbano, los escritores Amos Oz, A. B. Yehoshua y David Grossman celebraron una rueda de prensa en la que instaron al Gobierno a acordar de inmediato un alto el fuego. Yo estaba en un taxi y oí la noticia en la radio. El conductor dijo: “¿Qué quieren estos mierdas? ¿No les gusta que sufra Hezbolá? Estos cabrones solo quieren mostrar su odio a nuestro país”. Unos días después, David Grossman enterraba a su hijo en el sector militar del cementerio de Monte Herzl. Aquel “mierda”, por lo visto, quería unas cuantas cosas que no eran odiar a su país. Y, sobre todo, quería que su hijo, como tantos otros jóvenes que murieron en aquellos últimos y superfluos últimos combates, volviera a casa vivo.

    Es horrible cometer un error verdaderamente trágico, que cuesta tantas vidas. Es peor aún volverlo a cometer una y otra vez. Cuatro operaciones en Gaza, un número inmenso de corazones israelíes y palestinos que han dejado de latir, y seguimos en el mismo sitio. El único cambio que percibo es la tolerancia de la sociedad israelí ante las críticas. En esta ocasión es evidente que la extrema derecha ha perdido la paciencia en todo lo relacionado con el escurridizo término de “libertad de expresión”.

    En las dos últimas semanas, hemos visto a extremistas de derechas que golpeaban con porras a izquierdistas, mensajes en Facebook que prometían enviar a los activistas de izquierdas a las cámaras de gas y ataques contra cualquiera cuya opinión retrasa el avance del ejército hacia la victoria. Resulta que este camino ensangrentado que va de una operación militar a otra no es tan cíclico como podíamos suponer. No estamos dando vueltas en círculos, sino cayendo por una espiral hasta tocar un nuevo fondo que, por desgracia, tendremos que experimentar.

    Etgar Keret es un escritor israelí.

  90. Carlos A. Vegas dijo:

    ¿Y de las subvaloradas? Las de Mariano Ozores (el otro día revisé «Yo hice a Roque III» y me pareció muy actual), o las de Michael Bay

  91. Don Capitán Alatriste, pues yo, desde que están Munilla y Mario Izeta.pongo la X en la casilla de la Iglesia, antes no. Es que soy vizcaino.
    Don Carlos A. Vegas, estoy con vd. sobre Dylan. Lo mejor el directo doble con The Band. Hurricane y Cambio de Guardia están bien. Fui a verle a Bilbao, a la Plaza de Toros. Mi emoción no llegó ni a un bostezo. Conste que soy de lágrima fácil. Por cierto, Robin Willians es un «tufarro». Puestos a echar envites,Nuria Espert me carga la hostia. Me parece » muy teatrera».Por obligación de compañías fui en Bilbao a ver Fedra. Mi poca afición al teatro creo que me viene de aquella obligación.

  92. luigi dijo:

    Que dicen Messi y Neymar, y sus respectivos padres que España les roba.

    +
    Don Temístocles, gracias.

  93. Ramius dijo:

    D .luigi se ha contagiado del Patrón: esté o no de vacaciones, produce el doble. Y vaya producción, señores!

  94. Gorpua dijo:

    D. Navart, un hacha.

    La peli, una chapa.

  95. estilete dijo:

    Buenas noches. Película entretenidilla. Otras son infumables. Y curiosamente, muchas españolas. Pero si, la crítica de D. Navarth es acertada. Y aplicable a la España Zapaterina, y a la que quiere dar continuidad el PZancho.
    D. Luigi, Ud. si que montaría buenos guiones, cortos y entretenidos.

  96. ZEPPI222 dijo:

    Otro artículo bastante bueno (a ver si con este hay más suerte y no hiere ninguna sensibilidad).

    José Antonio Montano
    Martes, 29 de Julio de 2014

    La magia simpática del PSOE

    Me preocupa que Pedro Sánchez, flamantemente aplaudido este fin de semana, siga ejecutando los pases de magia simpática que han hecho del PSOE lo que es ahora: un escaparate cursi e inefectivo. Al principio, siempre cabe la duda de si el nuevo secretario general tiene una estrategia además de una retórica. Uno solo accede al liderazgo de un partido si dispone de esta retórica; o mejor, si esta retórica dispone de él, puesto que debe plegarse a ella sin remedio. El asunto es si debajo del cascarón hay un pollito que en un momento dado saldrá y dirá (y hará) algo diferente. Eso es lo que veremos a partir de ahora. (Aunque también existe la opción de que salga del cascarón y se lo coma Susana Díaz, en calidad de reina de la granja).

    El problema es que la llamada a la transformación que hizo Sánchez, y que resulta legítima en un socialista, no parecía ir acompañada de la conciencia de lo que implica eso. Para transformar la realidad –compleja y densa, escurridiza, resistente y enrevesada– hace falta mucho más que palabras: hace falta conocimiento, formación, inteligencia, habilidad, trabajo, esfuerzo. Como muy pocos de los personajes visibles de nuestro socialismo (y Sánchez tendrá que demostrar si es una excepción) parecen capacitados para tanta exigencia, la salida rápida y fácil es la del conjuro verbal. Eso que me gusta caracterizar como magia simpática.

    Cuando el expresidente Zapatero proclamó que «las palabras han de estar al servicio de la política» estaba dando el primer paso para que las palabras sustituyeran a la política. Bastaba entonces con pronunciar palabras, las palabras adecuadas: como si, por arte de magia, solo con eso se transformara la realidad, o se tuviese alguna incidencia en ella. Decir «alianza de civilizaciones» era ayudar a la paz en el mundo. Decir «diálogo» era desactivar a ETA. Decir «Estado de bienestar» era contribuir a su sostenimiento. Aunque lo primero fuese inútil, lo segundo falaz y lo tercero engañoso; esto último, porque la política que se estaba llevando a cabo arruinaba el país, incapacitándolo para financiar esos servicios públicos que se invocaban.

    En su discurso del congreso socialista, Sánchez ha incurrido también en la magia simpática. A lo largo de sus cincuenta minutos; y de un modo pasmosamente explícito en el 9:22, cuando dice: «Lo que tenemos que hacer es desterrar de una vez por todas palabras que nos afectan a todos, que nos indignan a todos, que se llaman crisis, pobreza, desigualdad, trabajo precario, paro, decadencia institucional, violencia de género, independentismo». Obsérvese que no habla de solucionar esos problemas, sino de «desterrar» su nombre. Ya puestos, se agradece que incluya el independentismo, aunque no deja de resultar chocante en el contexto. Y, por otra parte, el PSOE viene empleando otro pase mágico para conjurarlo: decir «federalismo».

    Pero de todos los ítems de esta escenificación hechicera, el más irritante es la repetición machacona del “-os -as”, que viene propagándose desde hace años en buena parte de la izquierda y que en Sánchez parece haber alcanzado su apoteosis. La idea (mágica) es que con eso se está contribuyendo en algo a la igualdad entre los hombres y las mujeres. Pero su sobreabundancia ha terminado convirtiéndolo en otras dos cosas además: en tic neurótico-supersticioso, como el de los creyentes que tienen que ir purificando su discurso a cada paso con jaculatorias; y en rasgo distintivo de clase, en algo así como una vestimenta verbal que identifica a un grupo de poder (casi iba a decir a una casta). Esto último tiene una comprobación diáfana, porque es modo de hablar exclusivo de esos políticos: nadie habla así en la calle.

    Y, francamente, no sé quién de la calle va a poder soportar las declaraciones del nuevo secretario general del partido socialista. He tomado nota de las veces que incurre en la manía en los tres primeros minutos de su discurso y resulta verdaderamente insufrible: «delegados y delegadas» (0:13), «compañeros y compañeras» (0:21), «trabajadores y trabajadoras» (0:35), «trabajadores y trabajadoras» (0:43), «compañeros y compañeras» (1:35), «amigos y amigas» (1:56), «de todos y de todas los compañeros y compañeras» (2:35), «todos y todas nosotros y nosotras» (2:49). Por lo demás, el lenguaje es tan cabrón que su hipotético machismo se termina filtrando: «los débiles» (0:51), «niños inocentes» (1:22), «todos vosotros» (1:58), «vosotros» (2:05), «los militantes» (2:08); sin sus correspondientes parejitas. Más adelante, se refiere también a Pablo Iglesias (¡el fetén, no el de Podemos!) como «el abuelo de todos los socialistas» (3:34). ¿Y qué pasa con ellas, las socialistas? ¿Se quedan sin abuelo entonces?

    Aunque en este punto sí que he echado de menos una reduplicación, que hubiese quedado fastuosa: decir que el fundador del PSOE era «el abuelo y la abuela». Lo que habría sido un guiño, de paso, para el votante transgénero.

  97. luigi dijo:

    Cuando El club de los poetas muertos se estreno, los adolescentes ya estaban aquí.

    +
    Don Ramius, don Estilete, les quedo sumamente agradecido por su gran amabilidad.

  98. Remero becario dijo:

    Buenas noches. Después de varios días de ausencia me asomo por cubierta y me encuentro con la magnífica entrada de D. Navarth,

    Sería por la edad, pero hay dos películas que siempre me ha resultado chocante como pudieron gustarme tanto la primera vez que las vi y como, al volverlas a ver al cabo de un par de años me pudieron resultar tan empalagosas, pesadas y nefastas. Una fue «Bailando con lobos», creo que ya he hablado aquí antes de mi opinión sobre ciertos trabajos de Kevin Costner, la otra es la que nos trae hoy D. Navarth, que me dolió mucho más que la de los indios. No me entra en la cabeza como un director que llevaba a sus espaldas Gallipolli, El año que vivimos peligrosamente y Único Testigo puedo perpetrar semejante engendro. En fin, todos nos equivocamos y más tarde arregló el desaguisado rodando, entre otras, Matrimonio de Conveniencia y Master and Comander… pero lo de los Poetas…no tiene perdón de Dios.

  99. Confieso que no vi la película cuando se estreno, sino muchos años después en alguno de sus pases por la tele. Simplemente me pareció floja. Robin Williams me pone nervioso y su sola presencia basta para contaminar la valoración que me merecen todas las películas en que aparece. No obstante, discrepo de la interpretación que propone don Navarth. Desde mi punto de vista, la película no refuta los principios que informan la educación tradicional, antes bien, los reafirman. El método pedagógico del profesor Keating opera en un registro carnavalesco, en la negación gratuita del orden dado: si la clase debe impartirse en un aula, saca a los alumnos al pasillo; si deben estar sentados, los invita a cabalgar las mesas; si las lecciones han de servirse de libros, las suyas lo hacen de un balón medicinal; etc. El objetivo teórico de esta inversión de papeles no es otro que la formación de jóvenes inconformistas que se cuestionen lo que se les plantea como dogmas. Sin embargo, el resultado no es la templanza en el juicio crítico, sino la sobrexcitación. En la medida en que esa sobrexcitación no tiene encaje en el orden dado, fuertemente jerarquizado, socialmente compacto, económicamente pudiente y políticamente conservador; desemboca en un conflicto perdedor, que no tiene posibilidad de forzar una solución transaccional, con lo que la acción nos devuelve al orden dado. Esa afirmación ni siquiera es velada, se plasma de modo manifiesto: un chico muere, sus compañeros se enfrentan y delatan, otro es expulsado, y el profesor despedido sin más honor que el postrero alzarse sobre las mesas de su parroquia más entregada. Lo que sí está bien visto es la naturaleza espuria del profesor. Es un mercader que no cree en su producto: la libertad de pensamiento. En una de las primeras clases obliga a los alumnos a arrancar una página de un libro que contiene una definición de poesía que le desagrada. No la refuta, pese a que la definición era grosera, simplemente la expurga. Aparece ya como el gurú de un conocimiento ágrafo que debe aceptarse sin más. En este terreno, es más interesante una película infinitamente más mala: La sonrisa de Monalisa. Una de las alumnas más brillantes de Julia Roberts acepta libremente el destino que el internado diseña para las chicas. Está enamorada de un chico, quiere casarse y formar una familia tradicional. Y esa decisión genera un conflicto profesor-pupilo que es interesante… Aunque la película es un forro de cojones.
    Perdón por la chapa y gracias al señor Navarth por la entrada

  100. Tengo un recuerdo muy vago de la película, por lo que deduzco que no me hizo tilín. Me ha llamado la atención el poco aprecio como actor que tienen la mayoría de los remeros a Robin Williams, que coincide con el que le tengo yo, me produce un rechazo…hasta físico.

  101. spaingloss dijo:

    Se me ocurren algunas sugerencias, también para valientes: Bagdag Café, La Misión, Como agua para el chocolate, Rosetta, Delicatessen, Soldados de Salamina, Matador, Hable con ella…

  102. SÍSIFO dijo:

    Sería por la edad.

    La disfruté en el cine con la edad adecuada para «sentirla» pero con el tiempo (y un único visionado posterior) me resulta ridículo que un profesor educado en el centro cree una generación de «pijos con VISA contraculturales» que, indefectiblemente, tienen poco recorrido frente a la cómoda realidad que les protege.

    Critica un sistema pero no presenta los resultados de su novedad, salvo la muerte de un alumno, frente a los probados beneficios de la enseñanza formal.

    Paco Martínez Soria, en sus películas, los llamaba melenudos.

  103. hdayala dijo:

    Buenas noches.
    Acabo de llegar a casa después de compartir unas cervezas con algunos componentes de esta Argos: ya es la segunda vez que coincido con jachuspa y con Thomson y he tenido la oportunidad de conocer a Chigorín, Dafne y feroz.
    Y aparte a una majísima chavala, de la que no me atrevo a decir el nombre, porque es bastante tímida y prefiero que sea ella la que se presente (y así pille confianza).
    Hemos hablado un poquito de todo, de la crisis, del estado de nuestra arcos y de algunas ausencias que se tendrían que haber remediado (ARCUUUUU). incluso ha habido tiempo para hablar de viajes, un tema que me gusta mucho, y del que aprendo rápido, aunque no soy ni mucho menos experto.
    El resultado, un rato muy interesante en compañía de buena gente y que esperemos poder repetir en breve, con los mismos y con otros componentes de nuestro sitio preferido.

  104. Richal dijo:

  105. Richal dijo:

    Y después lo arregla

  106. Chigorin dijo:

    Un honor y un placer, Don Hdayala.

  107. rostro pálido dijo:

    Yo también confieso que en su momento me gustó el engendro (y como a don Becario me encantó «Bailando con lobos y luego no la he podido aguantar).
    De temática colegial me divertí más con la española «Arriba Hazaña» (casi prefiero no volver a verla por si acaso…)

    Ah, y ardo en deseos de disfrutar de la deconstrucción de «Cinema paradiso». En general las películas con niño tierno modelo «Marisol» ma hacen añorar intensamente a Herodes.

  108. Rorschach dijo:

    Ha muerto María Antonia Iglesias. Descanse en paz.

  109. catcatcat dijo:

    Un habitual de TV3 con propuestas para el nuevo estado catalán:

    https://twitter.com/lopezbofill/status/494165251278249984

  110. Remero becario dijo:

    D. Lehningen 4:29 pm: “Cuando pasé de la EGB al instituto (año 1983)… ¡fumábamos en las aulas!”
    …y, añado, servían alcohol en el bar del instituto, en el recreo aquello parecía una discoteca, no acabábamos de aquella manera porque realmente no teníamos dinero que gastar, si nos faltaba para el fin de semana, no lo íbamos a derrochar los días de diario.
    Recuerdo a muchos buenos profesores de aquella época (1980 – 1984), varios de ellos de los mejores que he tenido en toda mi vida, pero ya había alguno que otro apuntando maneras prelogserianas, afortunadamente ningún Keating. Antes que yo estudiaron en él, así que me vengan a la memoria, Juan Ramón Jiménez, Ignacio Sánchez Mejías, Odón Betanzos, José Caballero, Eleuterio Población, Jesús Hermida, Víctor Vázquez Reviriego, Juan Pérez Mercader… y el Capitán Cortés, el del santuario de Nuestra Señora de la Cabeza en el 36/37, de quién supongo habrán retirado la placa que durante tantos años lució en la entrada del instituto.

    Este fue mi instituto, que me sigue encantando:

    http://www.iaph.es/imagenes-patrimonio-cultural-andalucia/bien.php?bi=3161&pid=17453

  111. En descargo del muy denostado Robin Williams, debo decir que fui a ver con mis hijos en edad escolar Jumanji y lo pasamos bien. A ellos les encantó, los efectos especiales encajaban. Me pareció cine de entretenimiento del de toda la vida. Sin muchas pretensiones intelectuales o formativas, eso que se ve tanto en el cine de nuestra tierra, que abusa de silencios (falta de guión, ¡Ay, cuanto se echa de menos a Azcona!, de miradas largas e inexpresivas, de enfoques oblícuos eternos, de no salir de entre catre y cama, en fin se lo dejo a D. Navarth que lo hace mucho mejor que yo…..

  112. D. Remero, preciosas fotos de un edificio mas que excelente. Parece de la escuela de Anibal González.

  113. Carlos A. Vegas dijo:

    Buenos días

    ¿Se ha muerto cabreada? ¿EPD? ¿De verdad? Por primera vez este año la parca hace justicia

  114. Richal dijo:

    Que tenga tanta paz como la que deja

  115. Buenos días a todos, aniversário de Carlos Sáenz de Tejada y Diego Salvà.
    In memoriam

  116. Junco dijo:

    Fueron unas cervezas en estupenda compañía. Una alegría haberos conocido. Ojalá haya más ocasiones.

  117. Pussy Cat dijo:

    Buenos días.
    Fundación para la Libertad
    NOTICIAS
    OPINIÓN

  118. Pussy Cat dijo:

    Aunque trae fecha de ayer en la pag. anterior, traigo este artículo de Ignacio Latierro, amigo de Jáuregui, asesinado hace 14 años por Eta. Todo muy bien, pero la realidad es que a su homenaje asistió nuestro diputado general. Garitano,hecho que es directamente una burla cínica a su memoria. Eso sí que aquel hombre no hubiera admitido.
    Qué diría hoy Juanmari

  119. viejecita dijo:

    ¡ Vaya, pues menudo chafe !
    Yo, dándome toda la prisa posible, para venir a leer las crónicas de la quedada de anoche , y el único que ha cotilleado un poquito, ha sido Don hdayala . Y viendo quien estuvo, y como escriben muchos de ellos, me parece muy frustrante. Un poco como si hubiera sido una reunión del M16 ( del M16 de los tiempos de 007 ). Y ¿ nadie hizo fotos, como se hicieron el año pasado ?
    Y a ver cuando hacen quedadas algún sábado por la mañana, que es el día libre de esta viejecita…

  120. Pussy Cat dijo:

    Patxo Unzueta, sobre el asunto catalán:
    ¿Hay margen para un nuevo pacto?

  121. Pussy Cat dijo:

    Sobre el eterno conflicto, un experto:Shlomo Ben Ami
    La trampa de Gaza

  122. Pussy Cat dijo:

    Victoria Prego, viene en abierto, qué bien:
    Paganos de fiestas ajenas
    Paganos de pagar, claro.

  123. Pussy Cat dijo:

    En «La tribuna del País Vasco», sobre la tangana de los curas vascos. Son casi todos, no se hagan ilusiones:
    Sacerdotes próximos a la “izquierda abertzale” acusan al obispo Munilla de despreciar el “euskera y la identidad vasca”

  124. Jose dijo:

    Al ser el anterior mi primer comentario, se quedó perdido en el limbo de los moderadores, así que porque creo que tiene interés por su relación con la entrada lo vuelvo a subir. Pablo Iglesias haciendo de profesor Keating:

  125. Pussy Cat dijo:

    En Crónica Global, José Vargas muy enfadado, con razón:
    Nuria Parlón nos cae mal

  126. Pussy Cat dijo:

    Emilio Campmany, en el tema:
    El día más triste

  127. Pussy Cat dijo:

    José García Domínguez, no se lo pierdan:
    La venganza póstuma de Tarradellas

  128. viejecita dijo:

    Les traigo un enlace de un artículo sobre la sorpresa de la única hermana de Jordi Pujol y Soley, respecto de la supuesta herencia de su padre, que me parece que no tiene desperdicio. Y me encantaría que lo vieran cuanto más, mejor, pero es que, en la cubierta de hoy no pega. Ya siento.

    http://www.surfeame.com/politica/hermana-cunado-jordi-pujol-recibieron-atonitos-confesion

  129. Pussy Cat dijo:

    Están sembrados en el «Libertad Digital».
    Pablo Planas:
    La omertá mediática en Cataluña

  130. Pussy Cat dijo:

    Rosa Montero:
    Grandeza

  131. Pussy Cat dijo:

    Impagable el youtube que trae, José, 10:19. E impresionante como esos estudiantes talluditos le siguen el juego al Robin Pablito. ¡Todos se suben a la silla!
    Y ese es el nivel de nuestra universidad…

  132. Jose dijo:

    El símbolo de inocente en la camiseta en primer plano es ya la guinda perfecta.

  133. Pingback: Películas francamente sobrevaloradas: El Club de Los Poetas Muertos

  134. viejecita dijo:

    Fabuloso el artículo de José García Dominguez que enlaza Dª Pussy a las 10’41 sobre el origen de la fortuna Pujol, el papel de Tarradellas, y las memorias de Ortinez ( tiene una segunda parte para pinchar y completar el artículo )
    ¡ Muchas Gracias !

  135. martincx dijo:

    Mea culpa, me gustó, pero es imposible volverla a ver, lo único que saco de esa película es que Neil luego crecería para ser el Dr. James Wilson en House.

    😛

  136. Mónica dijo:

    Yo me pregunto cómo haría el autor de este blog para enseñar a un grupo de chavales a ser librepensadores, teniendo en cuenta que no les puedes enseñar lo que te gusta porque eso significa imponer tu criterio. A lo mejor la película habría sido más de su gusto si el profesor se sentara en su mesa a observar a esas almas libres desarrollarse sin influencia alguna. Ah no, que es que ya tenían millones de influencias para convertirse en personas aburridas y convencionales.

    A ver, la película tampoco es una obra maestra, pero esta crítica es muy superficial. Ahora resulta que me tengo que sentir mal porque me gustara en su día, o porque me siga gustando hoy a mis 30 años. Pues lo siento, pero me sigue pareciendo una película digna de ver, tanto para los que hemos tenido la suerte de tener algunos buenos profesores que conectaban con sus alumnos como para los que solo conocen eso a través de la ficción.

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